Hace ya algunos años que conviven con nosotros una máquinas que han formado parte de nosotros, se han introducido de forma leve en algunos casos y traumática para otros, pero el caso, es que todos las tenemos. Los PC, los ordenadores personales, los netbooks, los notebooks, o cualquier otra terminación que utilicemos para referirnos a ellos ahí los tenemos.
Nuestra preocupación en la actualidad está básicamente en saberlos utilizar, conocer gran cantidad de software, aplicaciones, o como introducir las nuevas tecnologías en nuestro entorno, en nuestro trabajo, nos mejore o no, nos optimice o no nuestras tareas, el caso es utilizarlo, utilizarlo.
¿Pero que pasa cuando nuestros ordenadores fallan? Que hacemos? Somos capaces de repararlos o sin embargo entramos en una desesperación, desasosiego, desesperanza, mal humor e incluso cabreo irremediable. Bueno, ante esto, sobre todo calma, mucha calma. Para evitar todo esto empecemos conociendo en este caso a nuestro enemigo público número uno.
Podemos empezar desmontando nuestro ordenador, y comprobar y verificar cada uno de los elementos que lo componen, esto se entiende, que sólo es para los más osados y/o arriesgados... No obstante si esto nos parece mucho para ser la primera vez, siempre podemos empezar con algún curso virtual que nos enseñe los componentes básicos de nuestro ordenador, también vamos a conocer toda esa terminología que para los no profanos nos parece ininteligible, incomprensible y enigmática.
Para acceder al curso virtual puedes pinchar
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